Fuimos gente, somos gente y seguiremos siendo gente, somos GENTES DE PARTERÍA
TRADICIONAL MHUYSQA. Hemos estado aquí desde el amanecer de la humanidad,
desde que nuestra madre y padre salieron de la laguna de Iguaque. Hemos transitado con
el territorio que se transforma cada ciclo, así como se ha transformado el territorio de todas
las gentes , también se han transformado nuestros cuerpos, pensamientos, pueblos y
comunidades. Hemos transitado, seguimos aquí, estuvimos, estamos y seguiremos
estando.
El enredo colonizador llegó, intentó arrancarnos del territorio. Entendimos que el cuerpo
colonizador no es tan grande, ni mucho menos tan largo y suficiente. Nuestra voluntad es
tan cierta, abundante y presente que estuvimos, estamos y seguiremos estando aquí.
Somos GENTE DE PARTERÍA TRADICIONAL MHUYSQA. Amando y respetando las
sangres femeninas, hemos transitado el mundo. Somos la gente que cuida el páramo y las
lagunas, somos la gente que cuida la puerta de la vida y de la muerte, la gente que cuida
el aliento, el orgasmo de la naturaleza, la neblina que hace que el hielo siga siendo hielo en
la tierra, la gente que anda el placer como camino. Somos la gente hija, nieta, bisnieta,
tataranieta que acompañó a todas las gentes a nacer y a descansarse antes de nosotras.
Cuidamos el primer aliento de las gentes al nacer y el último aliento al descansarse y lo que
está en medio de estas dos. Cuidamos el canto, la danza el consejo y la historia primigenia
que trae la placenta y la sangre para cada gente al nacer y morir. Somos la gente que
acompaña la vida a llegar, a la muerte a irse y también a la muerte a llegar y a la vida a irse.
Somos la gente que cuida el umbral entre la vida y la muerte. Somos la gente que tiene en
su cuerpo y espíritu el arte de cuidar y ser cuidadas. Siempre hemos estado desde el
amanecer de la humanidad, creyendo y creando, cuidando los nueve orificios del cuerpo.